miércoles, 15 de junio de 2011

Cementerio de Highgate,arte macabro


Una de las joyas del Londres oculto o menos destacado en las guías turísticas de Londres es sin duda el cementerio Highgate. Este campo santo victoriano, construido en 1839 nació como un ambicioso proyecto para mejorar las condiciones de salud pública de la capital británica a finales del siglo XIX, donde el incesante aumento de la población colapsó los pequeños cementerios localizados en su mayoría adyacentes a las iglesias.


El cementerio tiene un aire misterioso al más puro estilo del romanticismo becqueriano muy interesante para los amantes de la fotografía. Pero su encanto no se queda en puro interés arquitectónico, sino que es además el lugar de reposo de conocidas personalidades como Karl Marx, el filósofo Herbert Spencer, el novelista George Eliot o el científico Michael Faraday.



A medida que el bosque iba enredándose en los ángeles y cruces, cubriendo las lápidas menos ostentosas, las historias de terror también entretegían el misterioso pasado del cementerio de Highgate. Desde cacerías de vampiros a ceremonias mágicas relacionadas con sectas, que encontraban en esta increíble obra de arte victoriano, el escenario perfecto para sus supersticiones y hechizos..

Pero los tiempo más oscuros ya han pasado, o al menos eso es lo que percibe el visitante, que desde los años 90 puede visitar el lugar, gracias a la labora de recuperación y conservaciónn de los "amigos del cementerio Highgate" que son quienes gestionan el lugar a través del cobro de 3 libras con derecho a hacer fotografías. También se puede buscar información sobre tours guiados y especiales para grupos en la página de la asociación.

El cementerio está dividido en dos partes, la Zona Este y la Oeste. La Zona Este es la más reciente y también la más discreta en cuanto a mausoleos. Está abierta durante todo el día y es la más visitada debido a que en ella se encuentra la tumba y monumento a Marx En su margen el borque sigue avanzando sobre las lápidas y los caminos están rodeados de una espesa vegetación entre la que adivinamos de vez en cuando victorianos ángeles mirando al cielo y cubiertos de brazos verdes que los atraen hacia el lado más salvaje, donde la naturaleza avanza implacable. No hay que perderse el mausoleo de la familia Dalziel, una impresionante obra de arte.

En la Zona Oeste los panteones alcanzan las tres alturas. Una de las partes más pintorescas es laAvenida Egipcia, flanqueada por puertas de mausoleos sustentados por enormes columnas, y que desemboca en el ‘Lebanon Circle’, una plazoleta circular rodeadas de más construcciones funerarias y presidida en el centro por un cedro del Líbano que según parece cuenta con más de trescientos años.

*Información sustraida de http://www.3viajes.com/cementerio-de-highgate/ 

2 comentarios:

  1. Es curioso, a mí no me verás en un cementerio "ni muerta" (que ya he dejado orden de eso), pero sin embargo, las veces que he estado en Inglaterra, Escocia o Estambul, ahí me ves cámara en mano. Me encanta pasear por ellos, pero es que creo que en otros países se vive con la muerte como parte integrante de la vida, mientras que aquí mientras más lejos se tengan los aspectos, por mínimos que sean, representantivos de la muerte mejor!
    Son parques, museos al aire libre, no sé, sitios que invitan a ser paseados.

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  2. Jajaja,tienes toda la razón,dependiendo del lugar,el tema de la muerte se toma de un modo u otro.En américa se estila mucho eso de hacer un catering después de la muerte de un familiar y en España,eso de invitar a unas tapitas y unas copitas después de un velorio se antoja un tanto frívolo.
    La muerte forma parte de la vida y la sociedad,de cada cultura depende verlo con ojos aterrados o con la naturalidad de un niño.
    Un abrazo Mercedes!

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